Usos medicinales del Botox

 

Usos medicinales del Botox

La popular toxina botulínica tipo A o Botox, famosa por ayudar a atenuar las arrugas de la parte superior del rostro tiene usos más allá de la parte cosmética. Así es, el uso del Botox fue aprobado desde el 2000, por la FDA  -por sus siglas en inglés- Administración de alimentos y medicamentos, para el tratamientos de algunos padecimientos crónicos.

Entre las enfermedades autorizadas están:  -el botulismo: causa parálisis muscular generalizada y sin un tratamiento adecuado, el paciente puede morir porque se paralizan los músculos de la respiración.

- Migraña o jaqueca crónica. Para personas que tengan 15 días o más de dolor de cabeza al mes y con episodios que duren más de cuatro horas al día.

- Bruxismo: es un trastorno en el que se rechinan, crujes o aprietan los dientes. 

- Disfonía cervical. Para personas con contracciones dolorosas de los músculos del cuello (tortícolis).

- Hiperhidrosis axilar primaria. Son las personas que tienen una sudoración excesiva por las axilas   

- Blefaroespasmo. Son las contracciones involuntarias de los párpados que hacen que una persona abra y cierre involuntariamente los ojos.

Para mejores resultados en ServiSalud la colocación del Botox se trabaja en complemento con la terapia física, con el Ozonoterapia, Plasma rico en plaquetas, hondas de choque, etc., con el objetivo de que cada paciente cuente con herramientas que pueda utilizar en su casa, para propiciarse alivio.

López asegura que “el Botox al igual que en el de uso cosmético se debe reaplicar cada 6 meses”. “La aplicación de esta toxina debe ser aplicado por un especialista y debe ser manejado con mucho cuidado ya que es sensible a la temperatura, al alcohol, al movimiento, por lo que debe hacerse con la técnica adecuada, para que no pierda su efecto”.

En el caso de la migraña crónica se aplica de una a dos unidades por punto, en 30 puntos diferentes. En el caso del Bruxismo se inyectan 15 unidades a cada lado, distribuidas en el área entre las orejas y la mejillas. En la parálisis facial se realiza una evaluación completa para saber cual es el musculo con mas movimiento y cual es paralizado, y poder definir donde se aplica el Botox, para mejorar la parte estética. 

Incontinencia urinaria, eyaculación precoz y sudoración excesiva son otros de los usos del Botox.

La tecarterapia es una radiofrecuencia de alta frecuencia que genera un calor suave que ayuda a regenerar las fibras de colágeno y crear una analgesia, ayuda a palear el dolor y rehabilitar las lesiones.

La Ozonoterapia en combinación con plasma rico en plaquetas se utiliza para el tratamiento de hernias y dolores en la espalda, para regenerar el disco, siempre en combinación con la fisioterapia.

El especialista asegura que este tipo de tratamientos no tienen ningún efecto secundario aplicados de forma ambulatoria y accesible para la mayoría de las personas.

Dr. Miguel López

Lic. Milena Hernández

Fisioterapeuta

Servisalud CR

Tel:2257-5500

Cel.: 8360-7541