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Comamos a colores, es la nueva campaña emanada desde la Caja Costarricense de Seguro Social -CCSS-, para ayudar y enseñar a la población nacional a tener una alimentación más saludable.

De acuerdo con la nutricionista Maricruz Ramírez “la idea es educar y aconsejar a toda la población en lo que se refiere a estilos de vida saludables para proteger la salud y prevenir enfermedades. Uno de los factores protectores de mayor importancia es la alimentación, ya que es por medio de esta que obtenemos los nutrientes necesarios para estar más saludables”.

 “Comer de forma saludable, variada y natural, es la forma ideal para tener muchos nutrientes en nuestra alimentación y aquí le vamos a enseñar a crear sus propios platos llenos de color y salud”.

La profesional añade que “a través del tiempo se ha visto que nuestro plato tradicional -el casado- puede ser una comida saludable, siempre y cuando cumpla con las raciones necesarias de todos los grupos de alimentos”. A manera de ejemplo la especialista “llama la atención sobre la necesidad de que la mitad del plato contenga vegetales -no harinosos- que puede ser de preparaciones variadas como un picadillo de zanahoria y vainica, escabeche y una salada verde. La otra mitad se divide en dos: el arroz y los frijoles y la proteína -carne, huevo, queso-, que además si tiene muchos colores es más saldable”.

Según la experta “en la CCSS, los profesionales en nutrición se guían por la evidencia médica y esta dice que la alimentación saludable debe basarse en una alimentación balanceada y natural, por esa razón no debe restringirse, ni exceder en ningún grupo de alimentos, por eso se habla de todos los colores. En el caso específico de los carbohidratos son los alimentos que nos dan energía, para desarrollar todas las actividades diarias y además por tradición, estamos acostumbrados a comerlos en todas nuestras comidas y nos gustan mucho”.

Ramírez enfatiza que “se deben comer todos los grupos de alimentos en las cantidades adecuadas, eso sí, cuando existen algún tipo de enfermedades, debe entrar a regir un plan específico de alimentación que le indica al paciente como alimentarse -y cuando-; si la persona está saludable puede consumir de todo”.

“Específicamente en el tema de las harinas blancas o refinadas, no tienen fibra y su aporte nutricional es bastante reducido, también están las harinas integrales -que tienen fibra- que nos dan un efecto de saciedad y nos hacen mantenernos llenos por más tiempo, para ocupar otra comida después de varias horas”.

“En nuestro país contamos además con gran variedad de leguminosas -lentejas, garbanzos, frijoles de diferente tipo-, que complementan una alimentación más saludable”. 

“No saber manejar las cantidades de alimentos, es uno de los problemas más importantes, comer afuera de la casa es más práctico, pero no necesariamente mejor, estos factores se vuelven riesgosos para la salud y debemos recordar que la alimentación debe ser considerada siempre como un tema de mucha relevancia para nuestra salud”.

La experta considera que “debe existir un planeamiento diario de la alimentación -que es un proceso voluntario en el que la persona decide-, pero se debe planificar y reflexionar acerca del tema”. 

“Una alimentación basada en comidas rápidas no tiene el aporte nutricional necesario, además tiene un exceso de elementos procesados y perjudiciales para la salud, mientras que una comida hecha en la casa me da el control de lo que estoy comiendo, de la manipulación de los alimentos y del aporte nutricional necesario”.

“Busquemos la comida tradicional, busquemos salud, evitemos altos índices en colesterol, triglicéridos y sobre todo sobre peso, queremos incentivar hábitos alimentarios saludables para todos, por esa razón en los comedores escolares se sacaron los alimentos ultra-procesados y ahora se dan comidas acorde con el concepto que enseña a los niños a alimentarse saludablemente, todos los días, de manera que crezcan con el convencimiento de que esta es la mejor forma de alimentarse”.

La experta señala que “uno de los mayores problemas de alimentación de los costarricenses es la falta de nutrientes saludables de algunos alimentos, más que una contabilidad o cantidad de calorías. Aprender a incluir frutas y verduras y vegetales -en todas las comidas- es parte del aprendizaje y del hábito que debemos poner en práctica. Lo que también incluye hacer mejoras en temas de cantidad de grasas y azúcares, así como la planificación semanal del menú, son parte de las normas que se deben cambiar y que ayudarán a encontrar el equilibrio entre peso y salud”.

“Recuerden siempre que lo más importante es alimentarnos de forma variada y natural, agregar muchos colores en el plato con muchos vegetales y hortalizas es la principal recomendación junto a la costumbre de comer su propia comida lo que le asegura la higiene, las cantidades y una mejor alimentación”

Ramírez señala que “las personas interesadas en contar con la asesoría y guía de Nutricionistas de la Caja deben acudir al Ebais correspondiente y solicitar al Médico general la referencia al especialista, tras exponer sus inquietudes o problemas con la forma de alimentarse o el peso”. Otra alternativa que ofrece la especialista se encuentra en la página oficial de la CCSS, donde encontrarán mucha información de alimentación saludable -www.ccss.sa.cr- “

 Licda. Maricruz Ramírez

Nutricionista

CCSS